lunes, 4 de marzo de 2013

Fist we take Prague, then we take Berlin... (un pequeño cambio con el permiso de Leonard Cohen).

Ya estamos de vuelta.

¡Sanos y salvos!

Con una maleta llena de ropa sucia, algunos suvenires y cientos de historias que contar. Muchas de ellas bajo el frío y la nieve de estas dos ciudades mágicas, muy distintas pero igual de impactantes.

Praga, tan monumental como romántica. Apabulla por los cuatro costados. Te deja K.O. ¡Puro arte!

Berlín, tan cosmopolita como vibrante. La vives, palpas sus latidos. Engancha. ¡Pura vida!

La verdad es que el viaje ha estado genial. Todo salió de película y eso es gracias a muchos factores. Soy de los que piensa que las cosas no salen por arte de birlibirloque sino que detrás de los éxitos hay mucho esfuerzo y buen hacer. Se ha transmitido bien la información desde el instituto, controlando los tiempos, las formas y los fondos. ¡Esencial para un viaje de estas características! La agencia (gracias Sol y Halcón Viajes) entendió nuestras necesidades y nos diseñó el itinerario a medida cual traje de sastre. ¡Impecable! Luego, el alumnado y sus familias asimilaron muy bien esa información, se ve que fue trabajada en casa. ¡Qué ayuda tan buena, familias! Y, para rematar ya en destino, todo discurrió bien, sin imprevistos importantes, salvo el de la huelga que ya sabíamos que al final iba a ser una simple gota marrón en un gran océano azul turquesa. El alumnado tuvo en líneas generales un comportamiento exquisito, rallando el sobresaliente. (Gracias chicos y chicas, habéis "triunfao").

Por mi parte, solo queda agradecer, y de una forma muy efusiva, a mis compañeros de viaje (Juana, Maricarmen y Juan) que hayan estado ahí, siempre al pie del cañón, derrochando profesionalidad y humanidad "a punta pala". Con vosotros al fin del ...

Paco Pérez.
Vicedirección.

Nota. Gracias Laura y Víctor. Os quiero. Un papá orgulloso.